El Manchester United sufrió una dolorosa derrota 3-0 en su propio estadio, Old Trafford, ante un Bournemouth que volvió a sorprender y extendió el mal momento de los “Diablos Rojos”. El resultado fue el mismo que el año pasado, y con ello, se profundiza la crisis que atraviesa el club británico bajo la dirección de Rúben Amorim.
Dominio total del Bournemouth
El equipo dirigido por Andoni Iraola, que se ha consolidado como una de las revelaciones de la temporada en la Premier League, reafirmó su gran momento al derrotar a un rival de renombre. Iraola ha llevado a su equipo a la quinta posición en la tabla, por encima de gigantes como Aston Villa, Newcastle y el propio Manchester City.
El joven técnico español sigue invicto ante el United (con dos victorias y un empate), con un impresionante balance de seis goles a favor y ninguno en contra en Old Trafford.
El primer gol: Dean Huijsen marca la diferencia
El Bournemouth se adelantó en el marcador a los 30 minutos gracias a un golazo de cabeza de Dean Huijsen. El central español se anticipó a Zirkzee y, con un movimiento preciso, definió con una parábola perfecta que dejó inmóvil al portero André Onana. Sin embargo, tras el gol, Huijsen estuvo cerca de convertirse en villano al cometer dos errores que pudieron haber igualado las acciones, pero el arquero Kepa Arrizabalaga intervino de manera crucial para mantener el marcador a favor de su equipo.
El golpe final: dos goles en el complemento
A pesar de los intentos del Manchester United, el Bournemouth sentenció la victoria en el segundo tiempo. Primero, Justin Kluivert fue derribado en el área por Noussair Mazraoui, quien cometió un penalti claro. Kluivert ejecutó la pena máxima con gran precisión, engañando a Onana y aumentando la ventaja.
Minutos después, una rápida transición ofensiva del Bournemouth culminó con un gol de Antoine Semenyo, quien aprovechó un pase profundo de Dango Ouattara. La jugada resultó en un gol que selló la goleada y dejó al Manchester United sin opciones.
El presente del Manchester United: una crisis sin fin
Con esta derrota, el Manchester United sigue en una espiral negativa. El equipo se encuentra en la 13ª posición de la Premier League, con apenas 22 puntos, a solo nueve puntos de la zona de descenso. Además, se encuentra a 14 puntos de la clasificación para la Champions League, mientras que el líder de la liga, Liverpool, tiene dos partidos menos.
Por su parte, el Bournemouth se ilusiona con clasificar a competiciones europeas, manteniéndose con 28 puntos, solo tres por debajo del Nottingham Forest, que ocupa la cuarta plaza.
Incidente en la rueda de prensa: el agua no para de caer
Lo más curioso ocurrió durante la rueda de prensa posterior al partido, donde Rúben Amorim intentaba justificar la derrota del United. Sin embargo, su discurso pasó a segundo plano cuando una gotera en el techo de la sala comenzó a inundar el área, distrayendo a los periodistas y convirtiéndose en una verdadera escena surrealista.
A pesar de esta situación, Amorim trató de explicar la ausencia de Marcus Rashford, quien no ha jugado en los últimos tres encuentros del equipo, incluyendo los enfrentamientos contra Manchester City, Tottenham Hotspur y Bournemouth. El DT portugués expresó: “Estoy probando diferentes cosas con jugadores diferentes, buscando lo mejor para el equipo”.
¿Rashford se va?
El delantero inglés, que ha sido uno de los referentes del club, dejó abierta la posibilidad de su salida en declaraciones recientes, al manifestar que está preparado para un “nuevo reto”. Sin embargo, su salida no será fácil, ya que tiene un contrato vigente por tres años y medio, con un salario semanal de 300,000 libras, lo que lo convierte en el tercer jugador mejor pagado del club, solo detrás de Casemiro y Bruno Fernandes.
Próximos desafíos
El Manchester United tiene mucho trabajo por delante si quiere recuperar su lugar en la élite del fútbol inglés. Los próximos partidos serán cruciales para salvar la temporada y evitar caer aún más cerca de los puestos de descenso. Mientras tanto, el Bournemouth continúa sorprendiendo a todos con su impresionante campaña.
Formaciones:
Manchester United:
Onana; Dalot, Mazraoui, Maguire, Martínez, Malacia (Yoro, m.46); Ugarte (Garnacho, m.55), Mainoo; Diallo, Fernandes, Zirkzee (Hojlund, m.54).
Bournemouth:
Kepa; Smith (Cook, m.46), Zabarnyi, Huijsen, Kerkez; Adams (Hill, m.89), Christie, Kluivert (Biling, m.78); Semenyo (Brooks, m.89), Ouattara, Evanilson (Ünal, m.71).
Árbitro: Craig Pawson
Estadio: Old Trafford, Manchester.